La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la Organización de Estados Americanos (OEA) otorgó medidas cautelares número 1039-17 a todos los niños y niñas pacientes del Servicio de Nefrología del Hospital JM de los Ríos frente a los riesgos y daños irreparables a la salud, y a la vida como consecuencia del desabastecimiento de medicamentos, insumos y equipos médicos en dicho centro de servicio hospitalario público de Venezuela.
La protección internacional busca garantizar la vida, integridad personal y salud de los niños y niñas venezolanos una vez agotados sin éxito todos los mecanismos de protección que existen en el país. El Estado venezolano está en la obligación de adoptar las medidas para proporcionar tratamiento médico de alta calidad, así como asegurar condiciones de salubridad y seguridad en el área de Nefrología conforme a estándares internacionales.
Con esta medida, es la segunda vez en menos de un año que la CIDH otorga cautelares a venezolanos con enfermedades crónicas. La primera correspondió a Yohnnis Hernández, persona diagnosticada con Hemofilia A severa, en octubre de 2017, quien desde hace dos años no recibe el factor necesario para tener un estándar de vida. La ausencia de medicamentos le ha generado artrosis, e hipertrofia en todas sus articulaciones, causándole daños irreparables a su cuerpo y calidad de vida.