Ya se cumplió un mes desde que en el hospital de niños JM de Los Ríos dejaron de hacer operaciones electivas.

El desprendimiento de un techo de sala quirúrgica causó la inhabilitación de los espacios de tres quirófanos, que fueron entregados como nuevos en noviembre de 2017.

Las mamás del servicio de Neurocirugía dicen que la paralización de las intervenciones aumenta el riesgo de muerte de pacientes que requieren con urgencia cambio de válvulas y drenajes cerebrales.

Hay casos de niños que tienen más de cinco meses hospitalizados. Otros consiguieron las válvulas donadas y esperan para el cambio urgente y hay algunos con los drenajes obstruidos que deben ser operados de inmediato.

Una de las representantes, que hizo la denuncia -pero a la que se le guarda su identidad pues tiene muchos meses dentro del hospital- dijo que los niños, nueve en total, están siendo tratados por largo tiempo con antibióticos mientras se normaliza la situación con los pabellones.

Eso nos parece grave porque son casos muy delicados y pueden recaer en cualquier momento. Además no hay yelcos, no hay guantes. Faltan insumos de atención diaria. Vemos que manipulan a los pacientes con un mismo guante y eso no es correcto.

Según otra mamá, que también pidió el resguardo de su nombre, la semana pasada enviaron una carta a la dirección del hospital solicitando respuesta, y a la fecha nadie les ha informado qué pasa con los quirófanos. “Dicen por los pasillos que aún están remodelando y que los están actualizando con equipos que requieren personal especializado que no los tiene el hospital”.

Las afectadas están pensando hacer una protesta en las puertas del centro asistencial, de no tener respuesta favorable en las próximas horas.